Apple presentó hoy dos nuevos modelos de su teléfono móvil
inteligente, el iPhone 5C y el iPhone 5S, con los que diversifica su
oferta de precios y espera ganar cuota de mercado más allá de la
exclusiva gama alta en la que se había mantenido desde 2008.
El
iPhone 5C, que saldrá a la venta en varios colores, es un dispositivo
con pantalla retina de 4 pulgadas y exterior de policarbonato que se
venderá a un precio que partirá de los 99 dólares (74 euros) asociado a
contratos con operadoras.
El diseño de un teléfono inteligente
más económico y la intención de Apple de estrenarlo en China a la vez
que en Estados Unidos indica la intención de la compañía de Cupertino de
posicionarse con solidez en el jugoso mercado asiático, donde su
competidor Android campaba hasta ahora a sus anchas.
Además, la
gama alta se renueva con el iPhone 5S, que mantiene el diseño de su
predecesor pero incluye un procesador de 64 bits que duplica el
rendimiento y la potencia de los gráficos, una cámara mejorada y un
sensor de huella dactilar con el que se puede desbloquear el teléfono y
también comprar contenidos y aplicaciones.